Registro de un Efímero Mural: Lectura en Torno al Mosaico Har ...
Abstract
En noviembre de 2020, el colectivo artístico Mosaikombat instaló en las cercanías de la comuna de Maipú, al surponiente de la ciudad de Santiago de Chile, un mosaico que ilustraba a dos personajes de la serie de animación japonesa Sailor Moon: Haruka y Michiru. La intervención visual y urbana, compuesta además de elementos simbólicos como un cóctel molotov y la bandera negra con una estrella indígena, se instaló en el repertorio de imágenes y fotografías que, durante el llamado estallido social chileno, establecieron el reclamo y materializaron de la indignación social mediante el uso de referentes extraídos y apropiados de la cultura audiovisual japonesa. El mosaico evidencia el modo en que, un año antes, el grupo subcultural otaku se instaló como sujeto político al utilizar el anime japonés como un importante insumo político para la revuelta social, construyendo una narrativa de la memoria desde el referente apropiado. En este contexto, el presente estudio realiza una lectura del fenómeno antes descrito entendiéndolo como una expresión de lo «latinnipón», una suerte de latinización del anime dada por los procesos de hibridación hipercultural que conducen a la apropiación y resignificación de referentes simbólicos transnacionales en los contextos de protesta local. Así, se permite una lectura que tensiona tanto las relaciones de territorialización como la articulación de una narrativa de la memoria del estallido a partir del mosaico de Haruka y Michiru. [In November 2020, the artistic collective Mosaikombat installed a mosaic near the Maipú district, southwest of Santiago, Chile. The artwork depicted two characters from the Japanese animated series Sailor Moon, Haruka and Michiru, alongside symbolic elements such as a Molotov cocktail and a black flag with an indigenous star. This visual and urban intervention became part of the repertoire of images and photographs that, during the Chilean social uprising, expressed demands and materialized social indignation through the appropriation of references from Japanese audiovisual culture. The mosaic highlights how, a year earlier, the otaku subcultural group emerged as a political subject, utilizing Japanese anime as a key political resource for the social revolt and constructing a memory narrative through appropriated references. This study examines the described phenomenon as an expression of the latinnipón identity—a form of anime Latinization resulting from hypercultural hybridization processes that drive the appropriation and re-signification of transnational symbolic references in local protest contexts. This article explores how the Haruka and Michiru mosaic navigates tensions between territorialization and the articulation of a memory narrative of the uprising].